La OMS mantiene el alerta máxima por el Covid-19
Finalmente, la Organización Mundial de la Salud se reunió y definió mantener el máximo nivel de alerta por la pandemia, cuando se pensaba lo contrario.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió este fin de semana, mantener el nivel máximo de alerta para la pandemia de Covid-19, exactamente tres años después de haber declarado la enfermedad como urgencia de salud pública internacional.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, siguió las recomendaciones del comité de urgencia sobre el Covid-19, compuesto de expertos, que se reunieron este viernes, según un comunicado.
El comité declaró a la epidemia de Covid-19 como una emergencia de salud pública de importancia internacional el 30 de enero de 2020, en momentos en que no se había registrado aún ningún deceso sobre apenas 100 casos fuera de China.
El doctor Tedros había indicado que juzgaba prematuro el levantamiento del nivel del alerta más alto. «A pesar de que no quiero adelantarme a la opinión del comité de emergencia, continúo muy preocupado por la situación en muchos países y el creciente número de muertos», declaró el martes a la prensa en Ginebra.
EL COVID-19 EN NÚMEROS
La enfermedad ha causado 170.000 muertes en los dos últimos meses.
Según cifras de la OMS, y desde su irrupción a finales de 2019, el Covid-19 ha provocado oficialmente 6.804.491 muertes al 27 de enero, aunque la organización y los expertos están de acuerdo en decir que el número de decesos es mucho más alto.
En octubre del año pasado, el Comité de Emergencia del Reglamento Sanitario había aclarado que no se expediría sobre el «fin de la pandemia», ya que no es una categoría con estatus legal, sino una caracterización.
«Usamos la palabra pandemia para que toda la población tenga un entendimiento más o menos homogéneo de los riesgos que representa una enfermedad que está presente en varios países. La OMS no declara oficialmente una ‘pandemia’ en los instrumentos jurídicos», declaró en esa oportunidad Ciro Ugarte, director de Emergencias en Salud de la OPS.
«En cambio la OMS determina si se está produciendo una ‘Emergencia de Salud Pública de importancia Internacional'», amplió.
Desde marzo de 2020, el Comité se reúne cada tres meses «para revisar la situación y si se siguen cumpliendo los criterios de una emergencia de salud pública».
LA OMS ADVIRTIÓ QUE SIGUE HABIENDO MUERTES POR COVID-19
Este viernes, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió que se están produciendo casi 40 mil muertes semanales por coronavirus Covid-19 en todo el mundo, más de la mitad de ellas en China, y lamentó que la respuesta mundial contra el flagelo de los países más pudientes «sigue siendo deficiente».
Al entrar en el cuarto año de pandemia, reflexionó que «no cabe duda de que nos encontramos en una situación mucho mejor que hace un año, cuando la oleada de la cepa Ómicron estaba en su punto álgido y se notificaban a la OMS más de 70 mil muertes por semana».
Cuando estos expertos se reunieron por última vez en octubre, el número de defunciones semanales notificadas era casi el más bajo desde que empezó la pandemia: menos de 10 mil por semana.
«Sin embargo, desde principios de diciembre, el número de muertes semanales notificadas en todo el mundo ha ido en aumento. Además, el levantamiento de las restricciones en China ha provocado un incremento de las muertes en la nación más poblada del mundo», alertó el funcionario.
Tedros recordó que en las últimas ocho semanas se registraron «más de 170 mil muertes», aunque en su opinión «la cifra real es sin duda mucho mayor».
El máximo dirigente del organismo sanitario internacional agregó que la OMS está actualizando ahora mismo sus cifras para incorporar los casos y muertes notificados por China en las últimas semanas.
Aprovechó su intervención para hacer un balance sobre estos tres años de lucha contra el flagelo. «Las vacunas, los tratamientos y las pruebas diagnósticas han sido fundamentales para prevenir enfermedades graves, salvar vidas y aliviar la presión sobre los sistemas y el personal sanitarios», expuso.
Pero lamentó que la respuesta mundial contra el virus «sigue siendo deficiente, porque en demasiados países estas poderosas herramientas que salvan vidas siguen sin llegar a las poblaciones que más las necesitan, especialmente las personas mayores y el personal sanitario».
«Muchos sistemas sanitarios de todo el mundo están luchando para hacer frente al Covid-19, además de atender a pacientes con otras enfermedades como la gripe y el VSR, y con escasez de trabajo y trabajadores sanitarios fatigados», destacó.
Al mismo tiempo, consideró que «la vigilancia y la secuenciación genética han disminuido drásticamente en todo el mundo, lo que dificulta el seguimiento de las variantes conocidas y la detección de otras nuevas».
«Y la confianza pública en las herramientas seguras y eficaces para controlar la Covid-19 se está viendo socavada por un torrente continuo de información errónea y desinformación», concluyó Tedros, citado por la agencia de noticias Europa Press.