Dudas sobre el equilibrio fiscal, el FMI y los depósitos en dólares
8 octubre, 2024 0El Fondo aumenta su cautela con la economía argentina tras ver la meta de acumulación de reservas incumplida.
El gobierno de Javier Milei enfrenta una nueva prueba de resistencia política en su intento por mantener el equilibrio fiscal. La reciente marcha de las universidades, en reclamo de mayores recursos, ha vuelto a colocar en el centro de la escena el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario. Aunque el impacto fiscal de esta ley es mínimo (apenas el 0,14% del PBI), su importancia política es enorme.
Si el Congreso logra revertir el veto, quedará expuesta la fragilidad política del oficialismo, lo que debilitaría la postura del presidente de «vetar cualquier aumento del gasto», una declaración que trajo calma a los tenedores de bonos y generó señales de confianza en los mercados.
El resultado de esta pulseada no solo marcará el futuro de la ley universitaria, sino también el del gobierno en relación con otras iniciativas legislativas que buscan aumentar el gasto público, como el FONID y los subsidios al transporte.
Estos proyectos también presionan sobre las cuentas públicas, poniendo a prueba la capacidad del oficialismo para contener el gasto y preservar el orden fiscal.
El FMI, cauteloso
En el plano internacional, el Fondo Monetario Internacional (FMI) sigue observando con cautela la evolución de la economía argentina. Aunque el país habría cumplido con la meta fiscal, la acumulación de reservas netas sigue siendo una tarea pendiente.
Este incumplimiento, aunque esperado, dificulta la posibilidad de que el FMI libere nuevos recursos para el pago de deuda privada o para sostener el actual cepo. La portavoz del FMI, Julie Kozack, resaltó algunos signos de recuperación económica en Argentina, como la leve mejora en la actividad y los salarios reales, pero también advirtió sobre los persistentes desafíos, especialmente la frágil situación social del país.
En este escenario, el FMI mantiene una postura cautelosa respecto a futuros desembolsos, lo que agrega presión al gobierno para encontrar soluciones alternativas.
Techo para depósitos en dólares
Tras un repunte extraordinario, los depósitos en dólares del sector privado mostraron un leve retroceso en los primeros días de octubre. Después de crecer casi u$s 13.000 millones entre el 12 de agosto y el 30 de septiembre, los depósitos registraron caídas netas de u$s 150 millones y u$s 68 millones, respectivamente, en las dos primeras ruedas de octubre.
Este retroceso sugiere que el fuerte flujo de dólares podría haber alcanzado un techo temporal, a pesar de la extensión del blanqueo hasta noviembre. De los u$s 31.300 millones en depósitos en dólares, un récord desde las PASO de 2019, u$s 14.000 millones están en poder de los bancos, mientras que u$s 12.400 millones permanecen «encajados» en el Banco Central.
Por otro lado, los préstamos al sector privado en moneda extranjera aumentaron en u$s 970 millones, lo que representa un incremento del 15% en apenas un mes.
Desde ese pico, tal como señalan desde Facimex, el ritmo de crecimiento diario se desaceleró, hasta llegar a la caída registrada este martes. Aunque se trata de una disminución moderada, es un dato relevante considerando la escalada exponencial observada en septiembre. Al cierre del martes, los depósitos en dólares del sector privado alcanzaron los u$s 31.300 millones, apenas u$s 1.200 millones por debajo del récord registrado el 9 de agosto de 2019, antes de las PASO de ese año.
Las reservas caen
El Banco Central ha tenido un desempeño sorpresivamente positivo en el mercado de cambios, con compras netas de u$s 569 millones en la última semana, la cifra más alta desde mayo. Sin embargo, estas adquisiciones no han sido suficientes para evitar la caída de las reservas internacionales, que retrocedieron u$s 860 millones en el mismo período.
La baja se debió en gran parte al pago de u$s 1.500 millones al Banco de Nueva York para cubrir intereses de la deuda de enero de 2025. Las compras del BCRA se vieron impulsadas por varios factores: el aumento de préstamos en dólares, que empujó a los tomadores a vender divisas en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), la emisión de deuda privada y el rebote en el precio de la soja, que aceleró las liquidaciones a u$s 120 millones diarios.
Sin embargo, los analistas advierten que esta tendencia podría revertirse en las próximas semanas debido al nuevo cronograma de pagos de importaciones, que generará mayor demanda de divisas en el mercado cambiario. A pesar de los esfuerzos del BCRA, las reservas internacionales netas siguen siendo negativas, con un saldo de u$s -4.900 millones, que se eleva a u$s -6.500 millones si se tienen en cuenta los vencimientos corrientes de los Bopreales. Esto pone en relieve la dificultad que enfrenta el Banco Central para estabilizar la situación cambiaria y mantener el ritmo de compras de divisas.