El dilema de las conexiones clandestinas al acueducto ante la desesperación por el agua
Las recientes intervenciones de las autoridades de Sameep y la Policía del Chaco para desarticular al menos 11 conexiones clandestinas en el acueducto entre Castelli y Miraflores, reflotó un viejo planteo de productores rurales que durante la ejecución de la obra solicitaron la posibilidad de acceder a una conexión legal que les permita tener este vital servicio en sus hogares.
Al respecto, el productor Martín Gaute expresó que «está bien lo que el gobierno hizo con estos operativos para terminar con la clandestinidad de las conexiones, pero también es necesario que les dé la posibilidad de acceder a este servicio; los productores también tienen derecho a tomar agua potable y pagar el servicio», enfatizó.
Aclaró además que «no es culpa de este gobierno que recién empieza, el error fue de los ideólogos del acueducto que no dejaron las tomas para que los productores puedan acceder al servicio; y lamentablemente ante la desesperante sequía que padeció la zona, muchos se vieron en la obligación de sacar agua desde la cladestinidad», manifestó.
No obstante, dejó en claro que «lo clandestino está mal, pero tampoco hay que meter a todos en la misma bolsa, hay que pensar en darles una solución a tantos productores que están frente al acueducto y no pueden acceder a este beneficio, como lo tiene cualquier ciudadano de la zona urbana«, manifestó.
En este marco, agregó que «lamentablemente siempre el sector productivo queda al margen de todo, no hay ayudas para los productores, y el hecho de que pase el agua por medio de sus campos y que no tengan para el consumo, es una burla. Entonces a todos los que hayan hecho conexiones cladestinas hay que buscarlos y denunciarlos, pero también hay que pensar en que son ciudadanos que merecen tener este vital servicio en sus hogares», cerró.