Los vaivenes diarios del dólar limitan la venta de aceites, yerbas y harinas

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Se agudiza la falta de abastecimiento por la tensión cambiaria informal y las subas de precios en los últimos días son considerables.

La corrida cambiaria que transita el país el lunes y martes tuvo su natural rebote en los que son las operaciones comerciales y quienes comercializan productos de consumo masivos explicaron el escenario.

El vicepresidente de la Cámara de Supermercados de Chaco, Miguel Simons, expresó que esta tensión que tiene la cotización del dólar informal en un mercado que a priori se lo muestra como racional pero que es el único que agiliza el acceso a la divisa estadounidense, genera incertidumbre y especulaciones principalmente de la industria.

«Claro que impacta negativamente en los precios, pero el supermercadista no puede guardarse la mercadería porque no tiene stock», expresó.

Indicó que esta situación lo que único hará es acentuar un déficit crónico que tienen con los proveedores en la entrega de mercaderías, que en un contexto de inflación constante, principalmente en alimentos, retrasan más de la cuenta la entrega de pedidos. Lácteos, productos de limpieza, aceites son algunos de los que desde un tiempo a esta parte se sabe que cuesta conseguirlos, marca.

Miguel Simons señaló que se transita una situación compleja.

Consultado acerca de lo que puede ocurrir con el programa Precios Justos, pensados para atenuar el impacto de la inflación a partir de un acuerdo entre la Nación y las industrias, expresó que la actualidad hará que su presencia en las góndolas sea cada vez más escasa. «Si antes constaba conseguir de seguir así, es una propuesta que va a desaparecer», consideró.

LIMITACIONES

Además, NORTE efectuó una recorrida por supermercados del micro y macrocentro y se dio el común denominador es las restricciones para la compra de productos esenciales como también el fuerte aumento de precios en algunos casos.

«Harinas, aceites, yerba y azúcar solamente vendemos una o dos unidades por persona», indicó para expresar que obedece a que proveedores están reticentes a entregar los pedidos hasta tanto vuelva a la calma y la previsibilidad al mercado.

Como ejemplo, indicaron que un paquete de azúcar que tenía un precio de venta final de 320 pesos saltó a 480 pesos, un paquete de medio kilo de yerba que cotizaba a 500 pesos se fue a 620 y un paquete de galletitas surtidas que se pagaba 380 pesos ahora vale 550 .

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