Verborrágico y sin filtros como siempre, Ramón «Tito» López dio la cara y desestimó las investigación por presunto lavado de activos y el pedido de detención que realizara el fiscal Patricio Sabadini.
Agregó que se enteró de su situación judicial ayer por la noche cuando volvía del campo de trabajar cuando el tema estaba sobre el tapete desde la siesta del martes y que este miércoles dará su versión de los hechos.
Entre los motivos, se define como el «enemigo número 1 tanto del gobierno provincial como nacional» y lo que se busca es hacerlo callar.
Sabadini considera que López es el jefe de una asociación ilícita que participa su familia y el pedido de detención se funda es que los informes de la Dirección de Migraciones señala que uno de los hijos registra un paso hacia Chile y todavía no vuelve.
Además, fue el propio López el que dijo que iría de vacaciones a Brasil en enero de este año cuando esté en curso una potencial causa y con ello sostiene el fiscal que fugarse sería una posibilidad si se complica su situación procesal.
UN ASCENSO
Finalmente, López indica que el trasfondo del asunto es un supuesto compromiso de parte de autoridades nacionales que tiene el representante del Ministerio Público de ascender a juez siempre que entregue «su cabeza» y sea puesto tras las rejas mientras dure la investigación.
Junto con Tito López, Sabadini pide imputar y detener a Librada Romero (esposa), David, Walter y Daniel (hijos) y Debora Acosta (nuera).